Si lo pensamos, tiene sentido lo que hacen los fabricantes: ¿Para qué agregarle un buen micrófono a algo que originalmente es una cámara de fotos? Es por esto que las cámaras DSLR tienen un micrófono que no da el mejor resultado. Muchas veces les habrá sucedido que mientras filman un plano se escuche el manoseo de la cámara; o capturar ruidos indeseables en fiestas o boliches, lo que directamente nos arruina el audio final. O cuando grabamos a alguien hablando, el micrófono pegado a la cámara puede ser un problema ya que la voz no se escucharía con claridad. En estos casos es cuando deberíamos recurrir a un micrófono externo.

 

Gracias a que la mayoría de las cámaras tienen entrada mini-jack para poder sincronizar lo que capturan en video, existen varias posibilidades para distintas situaciones. A continuación analizaremos tres opciones: Micrófono tipo Boom para la zapata de la cámara (la que se utiliza para el flash), un Micrófono Corbatero (para hacer entrevistas con personas que estén un poco más lejos o que necesitemos grabar claramente lo que dicen), o una Grabadora Externa, con la que tenemos más opciones pero a un precio mayor.

 

Empecemos con el Micrófono Boom

Son los más baratos y accesibles, pero debemos tener en cuenta algunos factores. Principalmente que tengan un buen sistema de estabilización (o suspensión), así todos los movimientos bruscos que hagamos no generen ruidos indeseados. Y por otro lado, la direccionalidad del micrófono. Pueden ser uni-direccionales u omni-direccionales. Los uni-direccionales tienen un ángulo de alcance de 90° a 120°, pero al momento de girar la cámara se nota un cambio de volumen. Otro dato importante es que tenga pasabajos, lo que impide que la señal se sature por algún colectivo en la calle o un taladro a lo lejos. Por último, parece una obviedad pero tener un peluche que no permita el paso del viento es algo que ayuda muchísimo. Como contra, podemos decir que están pegados a la cámara, así que no nos sirve para grabar algo que esté demasiado lejos, a lo que no tengamos alcance.

 

Los Micrófonos Corbateros 

Son los ideales para grabar voces que necesitamos que suenen nítidas. Son más aparatosos que los Boom, pero gracias a ellos conseguimos estar más cerca de la fuente de sonido, en este caso, la boca de quien habla. Pueden ser inalámbricos o no, la diferencia es sustancial en el precio. Los que usan cable cuestan alrededor de U$D200 a U$D350, mientras que los inalámbricos tienen un precio a partir de U$D850. Si sabemos que vamos a estar cerca y en un entorno controlado, no hay problema usar los que tienen cable, pero en caso contrario, los inalámbricos son la mejor elección. Para tener en cuenta, los últimos utilizan 4 pilas AA, así que también al precio habría que agregarle un pack de pilas recargables.

Una variante más económica para comenzar con este tipo de Micrófonos (U$D110) son aquellos que pueden conectarse a dispositivos celulares con grabador de voz mediante el jack de 3.5mm

 

La tercera opción son las Grabadoras Externas

Muchísimo más completas, pero también más engorrosas a la hora de trabajar. En este caso tendremos la grabación de sonido y la de video por lugares diferentes, por lo que es importante que tengamos algo que sirva de claqueta para poder sincronizar más fácilmente. Para esto además, vamos a necesitar dos personas, una que opere el sonido y otra que opere la propia cámara. Se puede manejar el nivel y podemos tener varios micrófonos conectados a la vez, y lo fundamental es que pueden grabar el audio directo desde consolas.

 

Lo importante entonces, no es tener el mejor micrófono sino estar equipados para el trabajo que necesitamos realizar. De nada nos sirve tener el mejor equipo si no le sacamos el mayor potencial. 

Cuarto Enfoque
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