Tenés nuevos productos y querés venderlos a través de tu e-commerce. Sabés que para eso necesitás fotografías de producto que sean de una gran calidad, para asegurarte mayores probabilidades de generar ventas.
Acá te compartimos algunos trucos de fotografía para productos que podés poner en práctica para lograr increíbles fotos.
1. Elegí la luz adecuada para tus fotografías de producto
La luz no es un tema menor. Y ésta es igual de relevante sea cual sea el estilo fotográfico que se desee seguir. Pero, ¿qué es más conveniente? La luz natural suele ser el aliado de muchas fotografías; es decir, es la que mejor suele funcionar. Sin embargo, por cuestión de tiempos y organización, puede hacerse difícil su aprovechamiento. Además, hay que saber bien cómo distribuir la luz para lograr el efecto deseado.
En cambio, las fuentes de luz pueden encenderse en cualquier momento del día. Podemos controlar la luz con mayor facilidad. Eso sí, una no excluye a la otra; por el contrario, funcionan excelente como complemento entre sí. Si querés saber más, acá te contamos cuáles son los tipos de fuentes de luz para cine y fotografía.
Pero, antes de avanzar con el siguiente tip de fotografías de producto, te mostramos cuál es la diferencia entre los tipos de iluminación (o su calidad):
- Iluminación suave: también conocida como luz difusa, es perfecta para crear un efecto más bien delicado.
- Iluminación fuerte: la luz dura es recomendable cuando se busca generar un mayor contraste.
Ahora bien, el tema de la luz no acaba acá. También hay que tener en cuenta la dirección de la misma: ¿luz frontal? ¿Luz lateral? ¿Semilateral o de contorno?
2. Incluí fondos que destaquen tus productos
¿Fondo blanco o fondo de colores? ¡Esa es la cuestión! La premisa es elegir un fondo para los productos que permita hacerlos brillar.
En este sentido, la clave está en no utilizar un fondo que resulte demasiado llamativo y pueda distraer la atención en los productos. Es decir, el fondo es un complemento de los productos. Los productos son los protagonistas.
3. Cuidá la composición fotográfica y jugá con los distintos ángulos
Conocer las reglas de composición fotográfica es lo primero para saber dónde es más conveniente ubicar cada elemento visual, para que éstos se complementen correctamente. Así que, si vas a fotografiar varios productos, lo importante es organizarlos de manera que se pueda obtener un buen resultado.
En cuanto a los ángulos, podés jugar y explorar diversos ángulos para encontrar la perspectiva que mejor se ajusta a la historia que querés contar con estas fotografías de producto.
4. Mantené estable la cámara
Otro tip a tener en cuenta al momento de hacer fotografías de producto es mantener estable la cámara. Pero, ¿cómo? Fácil. En este caso, usá un trípode que te ayude. Si no contás con uno, podés inventar algo más bien “casero” que te sirva para salir del paso.
- Truco: aprovechá la función «temporizador» del celular o la cámara de fotos.
5. Lo natural ante todo
¿Qué mejor que optar por lo natural? Las fotografías de productos contextuales son las más ganadoras. Tomar fotos a modelos usando los productos en situaciones reales contribuye a que los usuarios puedan tener una visión más real de los mismos.
- Tip que no falla: en tu tienda online, podés incluir fotos con fondo neutro y fotos contextuales de este estilo.
6. Cuidá la escala de los productos
Las fotografías de producto pueden ser algo engañosas, no porque así las marcas lo deseen sino porque se descuida el sentido de escala. En este sentido, hay productos que pueden ser confusos acerca del tamaño que tienen en la vida real. Y esto puede afectar la decisión de compra.
Entonces, ¿cómo resolver esto? Una buena práctica es incluir un objeto que las personas puedan reconocer con facilidad. Por ejemplo, en el caso de las joyas, se suelen tomar fotografías de anillos junto a una moneda de dos pesos argentinos.
7. La edición debe ser cuidadosa
Sí, además de que lo recomendable es cuidar la escala de los productos a la hora de fotografiarlos, la edición también debe ser lo más cuidadosa posible. ¿Qué significa esto? Hoy en día, las personas tienen acceso fácil a los filtros. De hecho, por esto mismo es que es muy fácil reconocer cuando una foto ha abusado de este recurso.
Pero cuando se trata de ofrecer productos, hay que generar un efecto sumamente creíble. Sí, podés corregir alguna que otra sombra, o la luz. Pero no distorsionar los colores, por ejemplo, o las texturas. De lo contrario, esto va a hacer que tu marca pierda credibilidad. Y es igual de válido que para otros tipos de fotografías, como la corporativa.
Si llegaste hasta acá, es porque estás pensando en hacer fotografías de producto que sean de alta calidad para, justamente, ¡vender! Es que la fotografía de producto es importantísima para la venta digital. Después de todo, los usuarios no pueden tocar, ver y probarse los productos que desean comprar, como sí ocurre en las tiendas físicas.
En cambio, en las tiendas online, los potenciales clientes dependen de la información que está disponible; y las fotografías juegan un rol determinante. Porque si bien se pueden redactar descripciones de los productos que sean atractivos y capten la atención de los usuarios, la fotografía lo es todo.
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